Existen enlaces con polaridad muy variada. Así, podemos encontrar
desde enlaces covalentes no
polares y enlaces covalentes polares, hasta enlaces totalmente iónicos. En los ejemplos siguientes, el etano tiene un enlace
covalente no polar C-C. La metilamina, el
metanol y el clorometano tienen enlaces covalentes cada vez más polares (C-N, C-O y C-Cl). El cloruro de metilamonio (CH3NH3+Cl-) tiene un enlace iónico entre el
ión metilamonio y el ión cloruro.