Los glicoles se pueden romper de forma oxidativa con
ácido peryódico (HIO4) para formar las correspondientes cetonas y aldehídos. Esta ruptura se puede combinar con la hidroxilación de alquenos por el tetraóxido de osmio o
permanganato de osmio frío para
dar el glicol y la ruptura del glicol
con ácido peryódico.